Emprendimiento/Gerencia/Tributos/Finanzas/Tecnología/Social/Educación

Opinión



sábado, 24 de diciembre de 2011

Carta al Niño Jesús 2011

Querido niño Jesús,

Trataré de ser breve…sé que tienes muchas cartas que leer y una sola noche para hacerlo –lo que de plano y libre de adulancia, me parece fantástico- y para rematar, haces lo imposible por cumplirnos a todos aunque sea con un apretón de manos invisible.

Yo te voy a decir la verdad –obviamente tú ya la sabes antes de que yo la escriba- ha sido un año difícil. Creo que mis niveles de tolerancia han ido decreciendo -como cae la popularidad del presidente del norte- por lo que empiezo a preguntarme si estoy dando más de lo que recibo!

Es por ello que debo pedirte una lista larga de cosas –me disculpan los que también hicieron su carta, pero esta oportunidad es una vez al año y hay que aprovecharla- que sé que me ayudarán mucho en mi devenir.

Te pido mayor tolerancia con mi prójimo. Te pido mayor entendimiento de los eventos pasados que nos trajeron aquí y que nos tienen metidos en este vapor, para poder darme cuenta de cómo debemos cambiar como personas y como sociedad.  Te pido me enseñes el camino, en caso de que yo esté equivocado y que me des la oportunidad de cambiar el rumbo si así fuere necesario. Te pido más tiempo para compartir con los míos. Te pido que no muevas tanto la tierra –da pavor ver el noticiero en las mañanas con tanto desastre-. Te pido que me devuelvas el país donde la gente era amable y daba los buenos días y no preguntaba cuánto hay pa´eso. Te pido menos estrés para los niños de hoy, ya que están sometidos a una presión que si me hubiese tocado en la infancia, creo estaría más loco de lo que hoy estoy. Te pido un poco más de juicio honesto de la gente. Te pido que como dijo JFK, me hagas preguntarme qué puedo dar yo a mi país, en vez de preguntarme como hago para exprimirlo. Te pido que me devuelvas el país de los niños jugando despreocupados en el parque y del aire fresco en la cara. Te pido me devuelvas mi perinola, mi trompo, mi yo-yo, mi papagayo y el libre mercado! Te pido te lleves la imposición de cosas. Te pido la reconciliación de un pueblo. Te pido que cuando hablemos de color, sea solo para identificarlos en la bandera. Te pido que quede en el olvido tanto discurso barato. Te pido el país donde el mérito y el trabajo se respetaba. Te pido una pluma y un papel para escribir todo lo que me pasa por la mente y que siempre haya alguien con ganas de leerlo. Te pido que me hagas salir de mi zona de confort, para siempre cambiar. Te pido que me pongas barras más altas para poderlas brincar. Te pido unos zapatos para correr y mucho pulmón para llegar. Te pido que me des el mensaje correcto para que mis estudiantes vayan por el camino de un mejor país. Te pido que la gente no pasé hambre en un país, donde el tener escolta y carro blindado está de moda.

Como ves, no te pido el pez…solo te pido la red! Aunque si me quieres traer al menos una muestra del pez…que sea un pargo a orilla de playa en Margarita!

Feliz Navidad y Prospero año 2012

domingo, 18 de diciembre de 2011

Actualidad Financiera y Fiscal en el Diario de Guayana N° 24

Fraude

Aguas arriba

Nos encanta hablar de fraude. Desde nuestra época de estudiantes resolvíamos con una simple palabra el hecho de estar en desventaja en una situación y como mecanismo de defensa lo primero que decíamos a viva voz era “aquí hay fraude”. Pasaron los años y estamos en la misma situación; volvemos a cantar fraude sin ningún reparo o prueba, cosa que obviamente no debe ser bien visto desde un punto de vista ético pero que como buenos venezolanos nos da una nueva anécdota para contar en la parrillada del domingo por la tarde.
Aguas en el medio

Recientemente, un buen amigo me envío un artículo relacionado con el fraude empresarial, emitido por una prestigiosa organización americana. Obviamente es información que trato de leer minuciosamente porque sencillamente toda información que circula por el ciberespacio puede ser de mucha utilidad en algún momento. En materia de fraude, existen eventos del pasado que en cierta forma definen el presente como lo vemos ahora en el ámbito de las finanzas.
Aparte de eso, día a día todo el mundo demanda respuestas y alguien tiene que tratar de darlas y más cuando tenemos hijos infantes que vienen cargados de preguntas que nos ponen a sudar frío y de las cuales en muchos casos carecemos de elementos para darlas.
Entonces, como el asunto es buscar y conseguir respuestas, me fui a la world wide web -que todo lo consigue y todo lo sabe- y vi que se define la palabra fraude   -del latín fraus, fraudis-, como: i) la acción contraria a la verdad y a la rectitud, que perjudica a la persona contra quien se comete; ii) acto tendente a eludir una disposición legal en perjuicio del Estado o de terceros y iii) delito que comete el encargado de vigilar la ejecución de contratos públicos, o de algunos privados, confabulándose con la representación de los intereses opuestos. Como ven, hay para todos los gustos.
Aguas abajo

La lectura de fraude me llevó a recordar los eventos de Enron Inc. que hicieron que desapareciera la firma de contadores más importante de la historia de la humanidad –según mi humilde opinión- y que surgió por la mala práctica de pocos, con efectos terribles para muchos.
El fraude es un evento que todos en la sociedad debemos denunciar, y procurar el castigo de los involucrados -venga de donde venga la acción-, y si viene de personeros que representan el Estado, el castigo debe venir con mayor rapidez, imparcialidad y contundencia. Espero que mi amigo se sienta feliz de que la información que me envía no es en vano. Claro, si no me hace ningún comentario de la columna el lunes, entenderé que se le olvidó leer el periódico el domingo. Hasta una próxima entrega. @wlagc  http://actualidadfinancierayfiscal.blogspot.com/ 


domingo, 11 de diciembre de 2011

Actualidad Financiera y Fiscal en el Diario de Guayana N° 23

Fijación de precios

Aguas arriba

A finales del Siglo XIX, la compañía F. W. Woolworth, Tiffany & Co. y otras entidades similares, decidieron como medida de simplificación administrativa, el fijar a todos los productos un mismo precio de venta. De esta forma, no tuvieron necesidad de diseñar una estructura de costos muy sofisticada. Dicho precio logró crear una fórmula sencilla para cubrir todos los costos inherentes a la operación y a la vez obtener el margen de rentabilidad esperado, en función a los riesgos asumidos. Obviamente, en el mundo globalizado en el cual vivimos, tomar una decisión tan simplista como esta pudiese ser incoherente, aún cuando sabemos que existen franquicias muy populares con un solo precio para todos los productos, lo que sin duda alguna está enfocado más a un objetivo de marketing.
Aguas en el medio

Luego, con el tiempo empezamos a ver como se popularizaban las subastas electrónicas, que sin duda alguna -aún hoy- nos hacen soñar con comprar objetos nuevos o usados que deseamos –o al menos eso creemos- con unos precios más que competitivos, lo que demuestra que la oferta y la demanda puede ser un juego en ocasiones hasta divertido. En muchas ocasiones he estado pegado a la pantalla de mi computador pidiéndole a Dios que nadie se fije en el producto por el cual estoy luchando y lamentablemente, como acto de magia, alguien siempre termina venciéndome en el último segundo.
Seguro pudiesen decir que es solo un engaño producido por el monstruo que controla las compras en línea, que solo persigue hacernos perder tiempo y dinero –probablemente sea cierto-.
Aguas abajo
Por supuesto existe una manera más técnica y armoniosa para determinar los precios de venta, y no es más que analizando cuidadosamente los costos incurridos en pro de producir o distribuir un bien o servicio plus la ganancia respectiva. Ahora bien, el meollo del asunto es saber cuál debe ser el margen apropiado que debe tener un bien o servicio, cosa que debe evaluarse desde muchos ángulos, donde obviamente no debe ponderarse solo el elemento cuantitativo del asunto. Claro, tampoco el factor subjetivo debe ser puesto sobre la mesa para determinar algo tan importante y complicado como lo es el precio de venta de un bien o servicio. Es bien sabido que en los tiempos en los cuales vivimos debe ganar el que oferta, el que demanda y el entorno. Si uno de ellos no sale bien parado, nacen serias y peligrosas distorsiones.
Durante muchos años, hemos tenido en Venezuela una importante cantidad de productos con precios fijados por el Estado y en la actualidad estamos frente a la aplicación de la Ley de Costos y Precios Justos, lo que vendrá a regular toda la economía. Soy de los que creen que aún es muy temprano para poder dar una opinión cargada de valor; no obstante, no es menos cierto que los empresarios deben trabajar fuerte en función de poder garantizar su sobrevivencia y seguir siendo rentables vía eficiencia. Hasta una próxima entrega. @wlagc  http://actualidadfinancierayfiscal.blogspot.com/ 

domingo, 4 de diciembre de 2011

Actualidad Financiera y Fiscal en el Diario de Guayana N° 22

Casos de emprendedores

Aguas arriba

Siguiendo con mi artículo de la semana pasada, quise traer un ejemplo muy interesante que lamentablemente en Venezuela aún no podemos disfrutar, y es el fenómeno Starbucks.
Puede sonar raro, pero tomarse una bebida en Starbucks es una experiencia inigualable (bastante caro, pero inigualable). Claro, esa experiencia –en mi caso particular- solo podía disfrutarla una vez a la semana, dado que el precio de la bebida era equivalente a aproximadamente dos almuerzos, por lo que el momento se hacía más especial aún.
Al entrar en una cafetería de esta cadena, sientes que el estrés lo dejas atrás, que estas en una burbuja y das rienda suelta al placer de hacer una buena lectura o de comenzar una amena conversación.
Aguas en el medio

Toda esa travesía comenzó en 1971 en Seattle, Estados Unidos, con un trió de jóvenes emprendedores con muchas cosas en común, entre las que resaltaba el hecho del gusto por disfrutar un buen té o café de alta calidad, música clásica, y una gran admiración por el clásico de la literatura norteamericana Moby Dick.
Este negocio no nació a priori con el deseo de convertirlo en una corporación internacional, sino por el profundo amor que tenían de vender un café de altísima calidad, que la gente pudiese disfrutar tanto como ellos.
Luego, con el tiempo se fueron separando poco a poco, para darles paso a personas con un profundo interés de expandir el negocio y convertirlo en lo que conocemos hoy.
Aguas abajo

Hay algo muy interesante en toda esta historia, y es el hecho de saber que en el momento en que estos tres emprendedores tomaron la decisión de iniciar su negocio, la ciudad estaba en medio de una grave crisis producida principalmente por la empresa Boeing, la cual había originado un desempleo importantísimo. Para entonces, se veía una inmensa valla en la ciudad de Seattle que decía: “¿La última persona en abandonar Seattle apagará las luces?”.
Este tipo de historias de emprendimiento nos dejan muchas enseñanzas en cuanto al afán de llevar a cabo un proyecto. Para ello hay que enamorarse de un concepto, ejecutarlo y dejarlo crecer. Para ser un emprendedor no solo se necesita dinero, también se necesita mucho coraje, decisión y por sobre todo, optimismo a toda prueba. Hasta una próxima entrega. @wlagc  http://actualidadfinancierayfiscal.blogspot.com/