Toma de riesgos
Aguas arriba
La vida está llena de riesgos. Están presentes desde el momento en el que abrimos los ojos, hasta nuestro último suspiro. Existen historias muy curiosas de personas que han fallecido por llevarse una semilla a la boca o por sufrir una herida al afeitarse. El miedo a lo desconocido nos paraliza y nos hace pensar las cosas una vez más de lo necesario, lo que concluye en desistir de nuestra intención primaria, redundando esto en un nuevo proyecto a ser guardado en la gaveta.
El deseo de tomar riesgos razonables es algo que debe cultivarse hasta que salga de forma espontánea, dado que un emprendimiento no puede nacer de la simple y básica idea de ganar dinero perse, sino del objetivo de innovar, lo que incluye hacerlo de manera rentable y por sobre todo autosustentable.
Siempre escuchamos el viejo dicho de "mejor malo conocido que bueno por conocer", lo que sin duda alguna hace que dudemos de lo que tenemos en mano para no dañar algo que hasta ahora ha funcionado -bajo ciertos parámetros- de manera aceptable. El positivismo del emprendedor debe hacer que perciba el emprendimiento desde una óptica distinta, donde maneje escenarios positivos y adversos siempre con una mirada crítica y con una estrategia para cada caso.
Aguas en el medio
Aquí el tema familiar tiene un peso inmenso. Cómo pararse en la mañana e ir a pagar el colegio de los niños diciendo que el emprendimiento no funcionó -y probablemente no lo hará en el corto plazo- y que estás en completa y absoluta bancarrota. Cómo ir al mercado día a día sin poder adquisitivo para comprar ni una caja de cereal; cómo hacer frente a eventuales enfermedades.
Estas son solo algunas de las preguntas a las que hay que hacerle frente de manera objetiva y con mucha conciencia en el acto. Para ellas no hay una sola respuesta, por lo que cada quien tiene que organizar su plan de la manera más efectiva posible.
Aguas abajo
Me surge ideal el caso en el cual los emprendimientos son llevados a cabo mientras se mantiene un trabajo bajo relación de dependencia, o en los casos en los cuales al menos un integrante del grupo familiar lo hace, de forma tal de poder cumplir con los gastos fijos, tales como: colegio, pólizas de seguro, hipoteca y alimentación.
Mi humilde recomendación…haga un plan objetivo. Presiónese. Llévelo al extremo de lo positivo y de lo negativo. Pondere el resultado de su hallazgo. Discútalo con las personas indicadas. Apasiónese al máximo. Investigue una vez más y tome la decisión acertada en el momento que apunte como el correcto. No hay una fórmula, siempre habrá el sentimiento de derrota, por lo que deberá domarlo y seguir… ¡no se detenga! Hasta una próxima entrega. @wlagc http://actualidadfinancierayfiscal.blogspot.com/
No hay comentarios:
Publicar un comentario