Actualidad financiera y fiscal en El Diario de Guayana Nº 71

Inflación

Aguas arriba

La inflación en Venezuela es uno de los mayores retos para los que nos dedicamos a la contabilidad, los impuestos y en general a las finanzas –personales o empresariales-.

Este impacto, que reconocemos tanto en la presentación de los estados financieros -con el objetivo de proporcionar información razonable, comprable y ajustada, para ser usada por los usuarios de la información financiera-  como para efectos fiscales -con el objetivo de incluir dichas desviaciones en la determinación de la renta neta fiscal o perdida del ejercicio-, debe ser minuciosamente determinado, analizado y validado, lo que se convierte en una batalla titánica en contra  del tiempo y las calamidades.

Aguas en el medio

Históricamente, ha sido un reto para todos el poder hacer determinaciones razonables, que estén  apegadas tanto a las normas contables, como a las leyes locales que rigen nuestro sistema tributario, con el fin de cumplir con el objetivo que dichos procedimientos pretenden. No siembre es fácil poder explicar dichos resultados a los usuarios, dado que por ocasiones se hace un tanto cuesta arriba dar una interpretación objetiva al resultado que nos arroje nuestra determinación, aún cuando nosotros tengamos la certeza y los elementos para explicarlo de forma técnica.

Entender que la inflación nos afecta al ir al mercado es sencillo, pero entender el por qué de los efectos en un estado financiero o en una declaración, se convierte en una suerte de elucubración colectiva, donde todos tratamos de explicar lo que en ocasiones se vuelve inexplicable a los ojos de personas que deben interpretar las cifras y tomar decisiones muy importantes en función a ellas y que cada error puede costar mucho.

Aguas abajo

La Federación ha mostrado su postura sobre las economías hiperinflacionarias y los tributaristas han volteado la cara a la hora de proponer un medio alternativo, porque lamentablemente cualquier otro procedimiento pudiese ser incluso peor.

Las razones para uno y para otro, no son sencillas. Sin duda alguna debemos entender cada día más las razones técnicas que nos llevan a hacer nuestros cálculos y en función a ello poder tener argumentos que expliquen de forma coherente y hasta didáctica que algo que comenzó en rojo, terminó en azul por obra y gracia de muchos elementos que a valores históricos no habíamos considerado.

Soñar con estados financieros, en los cuales no se requiera ninguna re-expresión y en declaraciones elaboradoras a valores históricos, es todo un sueño del cual estoy seguro que no querremos despertar –ciertas excepciones aplican-. Hasta una próxima entrega @wlagc http://actualidadfinancierayfiscal.blogspot.com/