Finanzas empresariales / Finanzas personales / Formación

Opinión



domingo, 15 de septiembre de 2013

Actualidad financiera y fiscal en El Diario de Guayana N° 113

Gestión bancaria

Aguas arriba

Hacer gestiones bancarias por lo general es una actividad muy poco amigable. No es sencillo disponer de tiempo ilimitado para esperar horas y horas para ser atendido por un mortal con pocos deseos de prestar un servicio medianamente proactivo, con lo cual el cliente se pueda sentir algo confiado al hablar de negocios, proyecciones y puntos de vista en cuanto a emprendimientos en proceso o por iniciar.

Normalmente, este tipo de servicio está disponible solo para grandes inversionistas, con capital ilimitado, los cuales reciben toda la cantidad y calidad de atención que necesitan para poder visualizar posibilidades de financiamiento y productos que se adapten a las necesidades de cada quien, dependiendo de su tamaño y tipo de proyecto.

Lamentablemente, el de a pie no tiene mucha ayuda al respecto, aun cuando sus proyectos y ambiciones puedan estar orientadas a la creación de un emprendimiento con altas probabilidades éxito.

El iniciar un emprendimiento sin financiamiento es poco factible y nada rentable. Se hace imprescindible tener dentro del proyecto de trabajo, la posibilidad de conseguir dinero al menor costo posible. Parece tarea complicada lograrlo con un banco local, partiendo de una atención limitada y sin la comodidad de poder exponer ideas con alguien del nivel mínimo requerido para ser un “ejecutivo de negocios”.

Aguas en el medio

Desde hace rato los bancos están en una lucha a muerte por tratar de descongestionar sus agencias, tratando de hacer uso de la tecnología; no obstante, algunos procesos requieren firmas y sellos autorizados, que hacen estéril la intención y solo se traducen en una simple estrategia de ahorro, donde el cuentahabiente o inversor tiene que usar recursos propios para imprimir referencias, estados de cuenta, etc.  Siendo así, el beneficio es cero para unos  y bastante para otros.

En otras latitudes, probablemente, el negocio bancario es menos rentable y más riesgoso, pero ofrecen una atención de primera. Visitar agencias y oficinas deja un agradable sabor de boca. El enfoque de asesoría se siente y el manejo de productos y opciones es evidente.

En ese supuesto, ir al banco es una actividad que nos puede llevar toda una mañana, pero solo por el gusto de ser atendido con amabilidad, mística y un gran nivel de asesoría, adaptado a nuestras posibilidades. No importa que llegue en una limosina o en transporte público, lo importante es que para ellos soy un cliente que puede que hoy no sea materialmente importante, pero mañana nadie sabe.

Aguas abajo

Si el emprendimiento se hace cuesta arriba. Si usted ve que en la televisión el arte de la publicidad dice que ir al banco a pedir financiamiento es pan comido, pero choca con la realidad que afronta todo aquel que se encarga de consignar papeles y papeles y no consigue resultados, o que en el peor –mejor- de los casos, consigna los documentos pero no existen productos y condiciones que se adapten a sus necesidades, no se desanime dado que una condición natural del emprendedor es su rescilencia antes las adversidades.

En algunos países han nacido nuevas formas de financiamiento, donde el emprendedor muestra un modelo de negocios rentable e invita a entes a colaborar con el capital de trabajo inicial para comenzar un proyecto que en el futuro redundará en resultados para la colectividad.

Otros casos menos sofisticados consisten en conseguir financiamiento poco costoso, cediendo un porcentaje limitado de capital, donde el inversor garantiza intereses y a la vez la posibilidad de obtener dividendos en caso de que el negocio que hoy es solo un proyecto, mañana sea un negocio en marcha rentable.

Si usted cree que las paredes lo persiguen, no se preocupe. Siempre saldrán destellos de sabiduría en medio de la adversidad, y dependerá de cada uno de nosotros buscar esa chispa que nos haga conseguir la solución. Sin duda alguna, el financiamiento es un problema complejo que debe afrontar el que decide emplear y no ser empleado. Hasta una próxima entrega. @wlagc http://actualidadfinancierayfiscal.blogspot.com/

No hay comentarios:

Publicar un comentario