Responsabilidad
Aguas arriba
Érase una vez una época no remota en la
cual era más sencillo (y hasta conveniente) concluir que cualquier error
técnico (advertido o inadvertido) era responsabilidad exclusiva de asesores de forma
dependiente o independiente en áreas tan intensas como la contable, laboral y
tributaria, siendo bastante recurrente escuchar a muy alto nivel gerencial y
directivo comentarios en los cuales se concluía que la confianza entre asesor y
asesorado era más importante que el argumento técnico en cuestión y por ello,
existía un exceso de la misma que se convertía por consiguiente en fuente del
problema.
En algunos casos (bastante recurrente)
el mayor problema consiste en una especie de amnesia colectiva, donde el
asesorado se planta en la firme posición de que no fue debidamente informado, aun
cuando repose en cartas y presentaciones.
En situaciones extremas, pueden admitir
que recibieron la explicación, pero luego de dilatadas discusiones concluyen
que "eso no es lo mío y para eso te contrato" y por ende afirman que
no tienen obligación alguna de entender y aprobar o no cualquier postura
técnica, por lo que de forma indirecta nace nuevamente la discordia entre las
partes.
Aguas en el medio
En honor a la verdad, ciertamente los
temas de nuestra competencia son un conocimiento que se ha vuelto complejo con
el tiempo; no obstante, son temas que pueden ser entendidos perfectamente a
nivel gerencial y directivo, por lo que considero que las explicaciones que se
den son del todo comprensibles y aplicables para estos niveles y en caso de que
no sea, queda de parte de las partes, tener la debida preparación.
Sin duda alguna, existen supuestos en los cuales el presunto asesor tiene una mediana (más hacia la baja) idea del tema, pero tiene una manera muy eficiente de explicar sus conceptos, por lo que en este caso si vale la pena concluir que el asesorado tendrá problemas sin saberlo siquiera; sin embargo, partamos de la buena fe del hecho cierto de que debemos ocuparnos en prepararnos si deseamos seguir manteniéndonos en estos temas técnicos.
El objetivo real es que la gerencia entienda que su responsabilidad es la de tomar decisiones asertivas en cuanto a todas las situaciones de su negocio, dado que el asesor será una herramienta para poder obtener información técnica que sirva de elemento para poder tener una visión integral del asunto, y no que el asesor cuenta con argumentos mágicos para resolver problemas que incluso pudiesen considerarse crónicos y con altos indicios de considerarse como vicios gerenciales, de negocios principalmente de pequeño tamaño, pero con tamaños problemas.
Aguas abajo
A final de cuentas, el punto central es que debemos no solamente impulsar la masificación de la información. Debemos impulsar un cambio paradigmático para que accionistas y directivos entiendan las repercusiones tributarias, contables y laborales de cualquier decisión que se tome, por más pequeña que se considere, con el objetivo último y sublime de cumplir con sus obligaciones a tiempo y de forma apropiada.
Como ya hemos hablado, la reforma tributaria del pasado noviembre, de la cual hemos hecho esfuerzos para divulgarla, tiene serias consecuencias pecuniaras y penales para las personas responsables del reporte financiero y en general en la toma de decisiones en el ambiente organizacional, por lo que obviar o desconocer ello puede ser altamente dañino para el patrimonio de empresarios y sus dependientes.
Es interesante el hecho de que muchos altos ejecutivos se han percatado de que no es suficiente que el staff profesional se actualice; muchos de ellos han entendido que también ellos deben tener un conocimiento importante en el tema, ya que de ello dependerá una toma de decisiones eficiente, y así tratar de minimizar en lo posible, una cantidad de riesgos que se hacen cada vez más ilimitados y que afectarán de forma determinante a las PYMES, las cuales por su estructura y fragilidad serán las que se lleven la peor parte. Hasta una próxima entrega @wlagc http://actualidadfinancierayfiscal.blogspot.com/
Foto: Estado Anzoátegui, Venezuela
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